MARCA PERSONAL – REFLEXIONES DE UN HEAD HUNTER
Todos tenemos marca personal, es la imagen, el recuerdo, la impresión que se llevan los demás de mi. «Tu marca» es la marca que dejas en los demás.
Por tanto, es subjetiva y tiene que ver con la escala de valores, las experiencias previas y la forma de ver el mundo, de las personas que te leen, que interactúan contigo,…
Cuando esas «etiquetas», atributos y características, son compartidas, coincidentes y generalizadas, se consolida en el ideario del entorno.
Esto suele ser así con los productos. Si preguntásemos a 10 personas si la marca Rolls Royce es de gama alta, el grado de acuerdo sería mayoritario y si la marca Dacia es austera también habría coincidencia.
Gracias a las RRSS, podemos divulgar nuestras opiniones, reflexiones, imágenes, videos, compartir las ideas de otros, publicar a través de nuestro blog, de plataformas como LinkedIn, de podcasts, canal de youtube,…
Podemos de esta manera, influir en la imagen que vamos a transmitir a quién nos vea, lea o escuche. Vamos dejando una huella digital, que va conformando la marca que dejamos en las personas que se fijan en nuestras interacciones,…
Gracias a mi actividad como head hunter tengo la inmensa suerte de entablar contacto con muchísimas personas, que me confían sus intereses y motivaciones (sean clientes o candidatos).
He entrevistado a cientos, a miles y he podido constatar un factor clave, común a las personas que tienen éxito en su gestión de carrera profesional y en las entrevistas, para alcanzar sus objetivos.
Ese factor no es otro que mostrarse tal como es, de manera espontánea sin intentar venderse, reflejando:
- Seguridad
- Humildad
- Sana ambición
- Confianza
- Interés
- Honestidad
- Respeto
Además, claro está, de determinados conocimientos, habilidades y experiencia específicos para cada puesto.
Trabajar tu marca requiere como primer paso, trabajar tu autoconocimiento, concretar:
- A qué das valor, en qué predicas con el ejemplo?
- Tus fortalezas, esas virtudes y dones que tienes
- En qué eres bueno/a?
- Qué quieres aportar, qué ofreces?
- Qué te legitima?
- Qué huella quieres dejar? Cómo quieres ser recordado?
Y buscar la coherencia entre tu ideal y la realidad, hacer lo que dices, y pensar lo que haces.
Los monjes benedictinos tienen una máxima, que dice: “Mens nostra concordet voci nostrae «Que nuestro espíritu concuerde con nuestra voz», eso es, dejarse guiar por los salmos y escrituras, o por mi ideario escrito,… mejor que por nuestra mente,…
Realizar este ejercicio es básico, si se hace con confianza y humildad, con amor hacia uno mismo y a los demás.
Buena semana!
Alberto Arqued
CEO & Founder
Sede XXI, Search & Development